No nos engañemos, son los sentimientos los que mueven el mundo; la ira, la venganza, el afán de superación, el amor… sobre todo el amor, son los culpables de que actuemos como normalmente no solemos hacerlo.
Cuando queremos conquistar a alguien “ponemos toda la carne en el asador” (como suele decirse), demostramos de lo que somos capaces, hasta dónde estamos decididos a llegar y, una vez conquistamos a la persona que deseábamos, ¿qué ocurre? Lo que no puede ocurrir es que perdamos toda la energía que hemos invertido, que pasemos a olvidarnos de nuestras metas, de nuestros logros. Lo que debemos hacer es seguir demostrándole que estamos ahí, que seguimos queriéndola conquistar cada día un poco más.
Para ello, hay fechas especiales en el calendario que nos ayudan a demostrar el amor; un cumpleaños, un aniversario, el día de la madre y, por qué no, el día de San Valentín. Hay quien defiende que se trata de una fecha cursi pero la realidad es que es todo lo cursi que uno quiera que sea porque, en el fondo, no es más que una excusa para seguir demostrando nuestro cariño. ¿Y cómo demostrarle tu amor? Seguro que ya lo has adivinado, es fácil; sorpréndela… ¡regalándole flores! Puede que más de una mujer diga que no le gustan las flores pero nuestra experiencia nos demuestra que no es cierta esta actitud. Recibir un bonito ramo de flores comprado con el corazón por tu pareja, no puede no emocionar a una mujer enamorada.
Regalar flores para San Valentín hará muy especial a tu pareja y será una muestra más de tu amor que a ella le emocionará. ¿Una recomendación? Si vas a mandarle las flores a casa o al trabajo, escríbele una tarjeta para demostrarle tu romanticismo, no tengas vergüenza porque será el complemento perfecto para un bonito día. Y si habías pensado en hacerle otro regalo, ¿por qué no completarlo con un ramo clásico de rosas rojas u otro ramo más original? Piensa en el ramo como un complemento a tu regalo, ¡le encantará y aún le conmoverá más!
Si quieres que te asesoremos con un ramo único, acude a VerdePimienta y te ayudaremos a sorprenderle. Está en tus manos celebrar San Valentín; con flores, con un regalo, con un desayuno o con una cena… ¡pero celébralo, celebra el amor!
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